El paracaidismo extremo es una modalidad del paracaidismo tradicional que se caracteriza por los riesgos y dificultades que implica. Es una actividad en la que se saltan desde altitudes muy elevadas, se realizan maniobras muy complejas y se vuela a altas velocidades.
Para practicar el paracaidismo extremo, es necesario contar con un equipo de seguridad especializado que permita realizar el salto sin peligro de sufrir lesiones. El equipo necesario consta de:
Además, es importante que el equipo esté en perfecto estado de conservación y revisado por un experto en la materia. No se debe escatimar en gastos ni en seguridad a la hora de practicar este deporte extremo.
Existen varias disciplinas dentro del paracaidismo extremo, entre las que destacan:
Esta es la disciplina más conocida dentro del paracaidismo extremo. Se trata de saltar desde el avión a una altura de entre 3.000 y 4.000 metros, para después abrir el paracaídas y planear hasta el suelo.
El BASE jumping es el salto desde un objeto fijo, generalmente un edificio o un puente, con el paracaídas abierto. Es una disciplina muy peligrosa debido a la cercanía del objeto y a la corta duración del salto.
Esta disciplina consiste en volar con un traje especial que permite planear por el aire. Es el deporte más extremo dentro del paracaidismo, ya que se alcanzan velocidades muy altas y se deben realizar maniobras muy complejas.
Al ser una actividad de alto riesgo, el paracaidismo extremo no está exento de peligros. Entre los riesgos más habitualmente asociados a esta actividad se encuentran:
Para minimizar estos riesgos, es importante seguir al pie de la letra todas las instrucciones de los expertos, respetar las normas de seguridad y contar con el equipo adecuado.
El paracaidismo extremo es una actividad que requiere de una gran experiencia y capacitación. Es un deporte muy emocionante, pero que debemos realizar de forma responsable y cauta para evitar cualquier tipo de riesgo.